viernes, 23 de marzo de 2012

En el nombre del protocolo

Por más que reviso el calendario escolar oficial, no doy con la parte que menciona la suspensión de actividades por la visita del Papa, y es que serán los estudiantes del estado de Guanajuato quienes conformen el cuerpo logístico de su visita, es decir, la valla humana, a costa de su actividad escolar. Si lo anterior viola o no lo que dice nuestra ley, eso no importa, ya que será por las “libertades religiosas”.

Mucho se ha escrito de lo que el gobierno de Guanajuato y en especial el de León han gastado por la visita de Benedicto XVI, o de si se ha generado una “reubicación voluntaria” de los indigentes en las calles de esa ciudad http://www.youtube.com/watch?v=u_yuzcVdhBQ, a mi en lo personal me ocupa el hecho de este evento haya permeado a niveles tan profundos en instituciones como la Secretaría de Educación de ese estado.

Con fecha del 23 de enero, comenzó a circular por todas las instituciones de nivel medio superior tanto públicas como privadas, una carta signada por el Arzobispo de León, Martín Rábago, que iba dirigida a los estudiantes invitándolos a formar parte de los 70 mil voluntarios necesarios para la visita de Benedicto XVI.

Ante la sorpresa de que dicha convocatoria no contó con la fuerza esperada y para finales de febrero apenas tenían 30 mil, la Pastoral Juvenil Nacional, el Episcopado Mexicano y el propio Gobierno de Guanajuato intervinieron de manera directa para el reclutamiento voluntario de jóvenes. El 29 de febrero se llevó a cabo en la Universidad La Salle del Bajío, una reunión de representantes de las instituciones del nivel medio superior del estado para ver de nuevo el tema de la colaboración voluntaria de alumnos en la logística del evento, inclusive planteando la posibilidad de obtener beneficios para las escuelas a cambio de un nutrido reclutamiento. En el nombre del protocolo, se violó el estatus laico.

Dos hechos quedan claros: primero, que el número de jóvenes que se sienten identificados con la figura del Papa se ha reducido, incluso en una región tan arraigada a la Iglesia Católica como el Bajío. Hoy es común escuchar que muchos de ellos utilizarán el “puente” para salir del estado. En segundo, seguramente alcanzarán el esperado número en su valla humana, lo cierto, es que ya no será a través del convencimiento de voluntades que lo logren.

Aunque las autoridades podrían justificar dichas acciones en el tono de propiciar un clima de entendimiento y buena voluntad; la implicación de entregar totalmente las disposiciones de un estado laico al servicio y comodidad del Jefe del Vaticano, en tiempos electorales, con un baño de sangre a cuestas, con unos candidatos que requieren la unción de la jerarquía para sus campañas, no puede más que hacerme pensar en lo vulnerable que se encuentran nuestras instituciones y la desconfianza que esto genera respecto a ellas, lo cual nos puede alejar a muchos, dejándolas nuevamente en manos de unos cuantos.

Leía que en el México virreinal era común que el gobierno en turno convocará a la suspensión de actividades cotidianas por acontecimientos como el nacimiento de algún heredero real, la coronación de un nuevo monarca o las visitas diplomáticas y de personajes distinguidos; pero en ese tiempo no estaban muy bien definidos los límites normativos de nuestras instituciones.

En la época que ahora nos ocupa, donde se supone que esas separaciones son claras y obligadas por ley, los gobiernos en turno aún siguen convocando cual pequeños virreyes.

viernes, 17 de febrero de 2012

Sin condón no hay Carnaval

Los lineamientos que regían la vida en la edad media daban mayor peso al bienestar del alma de una persona después de su muerte, que a las condiciones que le rodeaban y le permitían desarrollarse en vida.

Este tipo de pensamiento podría ser el sostén del argumento que aplica el alcalde de Mazatlán Alejandro Higuera Osuna, al prohibir la entrega de condones y encarcelar a quienes lo hagan durante el desarrollo del Carnaval por atentar como él afirma, “contra la moral pública”. De otra forma no me explico por qué lejos de mostrar una preocupación real por la población de aquel municipio, demuestra un desconocimiento o una omisión respecto a problemas tangibles como el alto porcentaje de embarazos adolescentes no deseados[1], de violencia sexual en parejas jóvenes[2] y de infecciones de transmisión sexual[3], no solo en su entidad sino en todo el país.

Para estar realmente a la altura del tercer carnaval más grande del mundo (según la revista Forbes), tanto el gobernante local como las autoridades estatales y federales, tendrían que haber pensando en acciones tan contundentes como las que el Ministerio de Salud de Brasil aplicará este año en su Carnaval al anunciar un programa enfocado en la prevención de VIH entre los jóvenes homosexuales y la repartición de nada menos que 70 millones de preservativos.

En nuestro país los esfuerzos conjuntos de los distintos niveles de gobierno alcanzarán según sus propias estimaciones 1 millón 500 mil preservativos en el Carnaval de Veracruz, que es por mucho, la cifra más alta de preservativos que tendrá un carnaval en nuestro país este año. Un contraste alarmante que refleja la desatención al tema.

Ese razonamiento va contra toda recomendación hecha por instancias internacionales como CEDAW[4] que solicitó a México “ampliar la cobertura de los servicios de salud, en particular la atención de la salud reproductiva y los servicios de planificación de la familia”, y las nacionales como el propio Consejo Nacional de Población que en su publicación más reciente “Situación Demográfica de México 2011”, explica que al estado le cuesta más atender los embarazos no planeados, que prevenirlos a través de información y educación.

Sin contar además con la Norma Oficial Mexicana de Salud 005, que indica claramente que la promoción y difusión de servicios de planificación familiar se debe efectuar a través de diversas acciones, entre ellas la participación social y comunitaria, como la que pretenden realizar las organizaciones lésbico-gay durante el carnaval.

Y para rematar lo que nuestra Constitución establece en el artículo al referir como un derecho el decidir de manera libre, responsable e informada sobre el número y el espaciamiento de nuestros hijos.

Pero la omisión y el desabasto de anticonceptivos es una constante en todos lados.

Al preguntar vía Infomex (No. de Folio 0001100432711) a la Secretaría de Educación Pública, por el número de preservativos adquiridos para la aplicación del Convenio de Colaboración firmado con el IMSS hace poco más de un año para prevenir el embarazo adolescente en más de mil 500 institutos de nivel bachillerato de todo el país, la respuesta fue: “La SEP no tiene monto presupuestario destinado a estas actividades, y no cuenta con información sobre la cantidad de métodos anticonceptivos adquiridos para este Convenio”.

Otro hecho más se registra cuando por la misma vía (No. de Folio 0001200302111) preguntamos a la Subsecretaría de Prevención y Promoción de la Salud y al Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva, sobre el presupuesto de operación de 2007 a 2011 que nos permita identificar la adquisición de preservativos. Al entrar a dicho informe no encontramos rubros claros que determinen con que partida y en qué cantidad fueron adquiridos, menos aún que destino tuvieron.

A lo anterior sumamos que hace unos días el gobierno de Nuevo León a través de la Subsecretaría de Salud Estatal, argumentó no haber adquirido condones para el actual trimestre por los “elevados precios” que ofrecieron los participantes de su licitación. ¿Quiénes participaron en la licitación? ¿Durex, Sico o los realizadores de los preservativos para Louis Vuitton? Otra respuesta que no convence a nadie cuando hay empresas nacionales que fabrican preservativos con costos menores a 2 pesos y cuya calidad se encuentra entre las mejores de acuerdo con estudios realizados por la Procuraduría Federal del Consumidor[5]. Si estos funcionarios no saben hacer su trabajo a la hora de licitar, podrían acercarse a las organizaciones que con menos recursos, hacen mejor las cosas que los propios gobiernos.

Desde hace mucho que todo en nuestro país está al revés. Hoy los gobernantes velan por el bienestar de nuestra alma y los líderes religiosos le dicen a la población por quién votar.



[1] 11.7% de los adolescentes inician su vida sexual en Sinaloa antes de los 15 años. El 46.5% de los jóvenes alguna vez ha estado embarazada o ha embarazado a alguien. De acuerdo con los Tabulados Básicos de la ENJUVE 2010

[2] El 28.4% de las parejas jóvenes han obligado alguna vez a su compañera/o a tener relaciones sexuales, ocupando el primer lugar nacional en este rubro. De acuerdo con los Tabulados Básicos de la ENJUVE 2010.

[3] El 13.4% de los jóvenes en Sinaloa no saben cómo prevenir una infección de transmisión sexual, pero 96.4% de los que sí saben, reconocen que el condón es un método para ello. De acuerdo con los Tabulados Básicos de la ENJUVE 2010.

[4] El Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer, CEDAW es un órgano de supervisión y seguimiento para la debida aplicación de la Convención y los progresos que los Estados Partes logren en virtud de las disposiciones contempladas en la Convención.

[5]Me refiero a marcas como "Encanto" que cuenta con estándares de la más alta calidad de acuerdo al siguiente estudio: http://revistadelconsumidor.gob.mx/wp-content/uploads/2011/03/condonesOK.pdf